El otro día, gracias a un juego de sombras, me fijé en un detalle que puede ser significativo de las prisas que abordamos en nuestro país a la hora de hacer las cosas...
Resulta que la tienda de Leroy Merlin en Badajoz abrió al público en junio de 2014. Y como todo en el tiempo moderno que nos toca vivir... se ha hecho en un plazo de tiempo récord. No recuerdo cuando empezaron las obras, pero en muy poco tiempo se ha levantado un gran edificio, y se ha puesto a funcionar de cara al publico.
Hasta aquí, todo normal, ¿no?
¿y hasta aquí también? No se ve nada raro,¿ verdad?
Pues la otra mañana madrugué (de ahí el intenso color dorado de las fotos), y mi sorpresa fue mayúscula cuando, gracias a la luz, un juego de sombras, me desveló el error:
Como se puede apreciar en las fotos anteriores, la barandilla de la izquierda se encuentra acabada. tiene su estructura completa, y la zona de los balaustres la forman unas piezas de plancha perforada, que evita caídas de objetos y/o personas de menor altura que las barandas. Todo lo contrario que la barandilla del lado derecho, que se encuentra sin terminar. Sólo tiene los largueros que conforman su estructura.
Ahora la pregunta es: ¿por qué? ¿prisas? ¿olvidos? ¿descarte de la segunda parte de chapas por algún motivo económico?
Desconozco si esta circunstancia puede ser contraproducente a la hora de permisos y licencias... pero cuando menos, es insegura. Por suerte, es una zona excluida al público, ya que parece una zona de transformación de energía eléctrica, pero es un lugar accesible al público, y en algún momento puede causar un disgusto.
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