Luz de marcha atrás con LEDs

Llevo mucho tiempo buscando soluciones interesantes para poder cambiar las lámparas convencionales incandescentes de mis coches por lámparas LED, que además de dar una luz más blanca, se supone que tienen que durar mucho más, con el consiguiente ahorro en mantenimiento.

Una de mis mayores batallas la tengo con la luz de marcha atrás. Mis dos coches tienen los cristales traseros tintados, para proteger del calor y para proteger a los críos en caso de rotura accidental de cualquiera de las ventanas, y por ello, cuando hago maniobras en el garaje, a oscuras, necesito una buena luz trasera.

Así que hace tiempo, a través de DX.com, adquirí esta lámpara:

La verdad es que es un pelín cara, pero ya he comprado muchas lámparas tipo 1156 o P21W, y ninguna me ha dado un resultado satisfactorio. Ésta lleva un LED central CREE, como la linterna que uso para el trabajo, y que tan buen resultado me lleva dando.

Una vez en casa, procedemos a hacer las primeras pruebas, ya en el alojamiento del coche:

Podemos apreciar ya que, en primer lugar, acopla bien (el tamaño de la burbuja es mayor que el de la lámpara standard), que da luz blanca, y que no se calienta demasiado, por lo que procedemos ahora a insertar el conjunto de portalámparas en su ubicación dentro de las tulipas, y vemos la diferencia entre lámparas:

 lámpara actual incandescente

lámpara nueva LED

Debido a que las cámaras de fotos en modo automático juegan con diferentes parámetros, como la exposición y la temperatura de color, no se aprecia demasiado el cambio.

Por ello, muestro ahora una foto desde detrás, para que se aprecie mejor el cambio en la temperatura de color de las dos lámparas trabajando a la vez:

Ahora sí parece una blanca y la otra amarilla... ¿no? Pues veamos el rendimiento luminoso con una foto del reflejo de ambas luces en la pared:

Como se puede apreciar, la lámpara LED da un flujo más escalonado, y quizás, algo menos de potencia de luz en el centro, si bien, es de un tono más azulado y más agradable al ojo. A mí, particularmente, me encanta.

Y para concluir, decir que si bien las lámparas LED para automoción aún no están a la altura de las convencionales, por precio, por potencia luminosa, y porque suele ser ilegal montarlas, van en el buen camino.

El color, la durabilidad, y el bajo consumo, hacen que sea una alternativa muy, pero que muy, apetecible.