La última vez que me acerqué al circuito para que mi hijo se montara en el kart, se nos estropeó. No quería arrancar, y tirando, tirando de la cuerda de arranque, al final se quedó toda fuera. Imposible arrancar, y aunque lo hubiera hecho, imposible rodar con la cuerda colgando.
Así que tocó desmontar el motor, y llevarlo a casa para echarle un vistazo.
Aquí tenéis a mi manitas particular:
Lo primero que llama la atención es el estado del tornillo que sujeta el sistema... habrá que cambiarlo. Eso sí, ha tenido que entrar en acción un destornillador y un martillo de apoyo... porque no había quien lo desmontara.
Una vez desmontado, se observa que el sistema no tiene ninguna pieza rota. Simplemente el fleje del muelle se ha salido del soporte del enrollador de la cuerda, por lo que habrá que montarlo sin más. Nos ahorraremos el material, pero no la mano de obra.
Lo que no he llegado a saber es el motivo de esta avería. Y las cosas que no se averiguan... no se pueden arreglar, por lo que es fácil que se reproduzca nuevamente cuando menos te lo esperes.
Bueno, pues tras un día de parón por culpa del martes de carnaval, nos vamos de tienda, y lo primero, compramos unos tornillos iguales al estropeado para sustituirlo. Mejor los compro de cabeza de estrella, que luego serán más fácilmente manipulables:
Y aprovecho también para comprar en Garber e hijos un par de metros de cuerda de arranque. La que montaba el kart era una cuerda simple de tendedero, un pelín gruesa para su uso. Ésta que he adquirido entra como un guante en el enrollador.
Nudo a su fin, para fijarla, y comenzamos a enrollarla alrededor del eje, en el sentido de las agujas del reloj. De todas formas, la forma de la salida a través de la carcasa también nos orienta acerca del sentido correcto de las vueltas:
Ahora colocamos el conjunto del enrollador, con la cuerda ya introducida, en el sistema de flejes que hará que retroceda tras el tirón, colocando en su sitio los enganches del muelle, y sin tensionar aún el fleje:
Y ahora sacamos el extremo de la cuerda por su orificio lateral, si bien antes le damos un par de vueltas o tres al conjunto, para precargar ligeramente el sistema, y asegurarnos que retrocede la cuerda entera cuando pongamos en marcha el motor:
Ahora hay que encajarlo todo en el sistema que va unido al cigüeñal del motor, que se encuentra cerrado:
Para abrirlo, y permitir que las piezas móviles se sitúen en las aberturas del arrancador, las sujetamos con un par de hilos finos de cobre, y las abrimos ligeramente. A la vez, colocamos el conjunto completo de la tapa lateral con el arrancador, y cuando se encuentra en su sitio, tiramos de los hilos para extraerlos.
Una vez fuera los hilos, se atornilla la tapa al lateral del motor, y trabajo acabado. Ahora sólo toca volver a colocar el motor, llenar el carburador de gasolina, y disfrutar del kart.
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