Hace ya un tiempo le instalé a mi Peugeot 307 SW un sensor de aparcamiento invisible en el parachoques trasero. Tiene una gran ventaja respecto de los kits de ultrasonidos, y es que todo queda oculto, no se ve, y nada de lo que hagas es irreversible. Pero también tiene una pega, y es que cuando el parachoques se moja deja de funcionar correctamente, y emite alarmas erráticas. Suerte que en Badajoz no llueve demasiado... ja ja ja ja
Recupero y edito la información que publiqué en su día, y la muestro de nuevo en mi blog.
Parte I. Las primeras pruebas.
En primer lugar, deciros que el kit en cuestión, puesto en casa en dos o tres días, no ha llegado a 90 euros. De momento, todo bien:
Como se puede apreciar, el tamaño es muy compacto, comparándolo con el clip:
En segundo lugar, que indica en las instrucciones que ha de estar a más de tres centímetros de cualquier parte metálica del coche. Dice que un trozo pequeño de chapa (por ejemplo una bola de remolque) no afecta a su funcionamiento... pero es que el 307 SW tiene una barra metálica bajo el parachoques trasero que lo flipas:
El caso es que, una vez leídas y releídas las instrucciones, me pongo manos a la obra.
Comienzo buscando la alimentación del conjunto, que va a la bombilla de marcha atrás del coche, pero cuando desmonto el piloto, me encuentro con esto:
Así que, pensando un poco, como este coche tiene centralita electrónica para todo, y evitar que el consumo típico del sensor de marcha atrás (50 mA) la estropee o la vuelva loca, decido atacar el positivo directamente a la bombilla de marcha atrás, y así dejar de pensar en si (a pesar de que da continuidad total entre el cable y la bombilla) dentro de la placa del piloto hay alguna sorpresa...
(lo malo es que cuando se funda... hay que volver a soldar otra bombilla al cable)
El negativo lo cojo del cable de masa, que por cierto, es de mayor sección y no me preocupa tanto el consumo, empleando un robacorrientes o conector "cangrejo"...
Una vez sacada la alimentación del conjunto... viene lo más complicado, montarlo en el parachoques evitando la temida barra interior...
Para ello, hago varias pruebas, colocando el sensor (una larga cinta de aluminio adhesiva) en la parte de fuera del parachoques, por diferentes lugares, probando su sensibilidad...
En esta primera disposición, parece que va bien, pero me detecta demasiado las paredes laterales (el garaje es algo estrecho) y pierde sensibilidad para la parte frontal, lo que me despista bastante, y no pasa la prueba. Prefiero que marque menos los laterales, que para eso tengo los espejos, y se centre en la parte trasera, invisible en cualquier circunstancia.
Luego pruebo con esta disposición, alejándome de la barra de hierro por debajo de la misma:
De esta forma, me alejo de la temida barra, pero al estar tan abajo (las instrucciones piden que se coloque en la parte más exterior y alta posible del parachoques) me detecta en angulo inclinado, y no en plano, con lo que hasta que no pego casi el coche a un obstáculo... no empieza a pitar, y no lo hace de forma gradual, sino la señal final de alarma.
Parte II. La instalación definitiva.
Tras un par de semanas de pensar, repensar, leer, y releer, me vuelvo a poner manos a la obra, con la idea clara de desmontar el parachoques, y pasar a la acción de nuevo.
El caso es que tras adquirir en ebay la revista técnica del 307SW, veo como se desmonta el parachoques, cuestión ésta que también había leído en el recomendable foro del clubpeugeot.es.
Primero hago una nueva prueba, con el sensor donde sería su posición más idónea, en caso de que la barra metálica no le afectara. Esta vez me dejo de colocar sensor por los laterales, que en el primer intento me falseaban las lecturas si me arrimaba a paredes u otros obstáculos, y dejo que detecte SOLO lo que no se ve.
Para ello desmonto el protector de plástico mate superior, y hago las pertinentes pruebas, con resultados satisfactorios.
Viendo que ahí parece que funciona, termino de desmontar el parachoques, y lo pego con cinta de carrocero en primer intento por su interior, lo más alejado posible de la barra, y lo más alto posible, tal y como se ve en la "pegada" final:
Una vez unido el sensor definitivamente al detector, presentado el parachoques, y visto que funciona, se monta todo de nuevo, y a correr.
La verdad es que el aparato funciona muy bien, y está oculto, por lo que, ni te lo van a robar, ni te lo van a estropear, ni lo vas a perder, ni nada de nada.
Por otra parte, está el avisador, un pequeño altavoz, que he dejado puesto en los plásticos laterales del maletero, a elevada altura, para que no se mitigue su pitido por el equipaje, sin pegar nada, ni taladrar nada, empleando los huecos naturales del plástico para llevar los cables:
Como se puede apreciar, queda MUY DISCRETO.
Resumiendo, un aparato muy recomendable, nada caro, y que funciona muy bien.
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