En este periodo de rebajas, El Corte Inglés y Banco Santander nos han dado la oportunidad de observar el coche de Fernando Alonso de primera mano en el Centro Comercial pacense. O al menos eso es lo que se ha publicado: hoy.es
El caso es que, como amante de las diferentes disciplinas automovilísticas, tenía unas ganas enormes de ir a verlo, y hacerlo, además, acompañado de los críos, pues ya he visto más de un F1, a diferencia de los nenes, que se han limitado a hacerlo por televisión.
Eso sí, algún amigo ya me había advertido de que no se fiaba mucho del fórmula, llegando a calificarlo incluso como una maqueta de cartón piedra.
Bueno, pues allá que nos vamos, y cuando llegamos al mismo, no me parece tan mal. Es más, llego a pensar que se trata de un F10 real, tanto como el que ví el año pasado en los entrenamientos en Jerez, o corriendo en Montmeló.
La estampa del coche... tremenda:
De todas formas, en cuanto empiezas a hacer fotos, te das cuenta de que al inventor de poner una alfombra roja, habría que darle un premio. Rojo sobre rojo, las fotos no quedan demasiado bien.
Y claro, tras las fotos de rigor con los chavales, uno que es un enreda de la fotografía y de los detalles de un F1 a esta distancia, empieza a sacar alguna foto reveladora...
Volante colocado al revés.
Neumáticos excesivamente pulidos y brillantes, y pegatinas de Pirelli hechas con vinilo.
Huecos de refrigeración tapados con rejillas, y vacíos en su interior.
Triángulos de suspensión mal rematados y con piezas metálicas en su interior.
Discos de freno aparentemente ausentes.
El caso es que las fotos se hicieron, los nenes se quedaron asombrados (aunque menos de lo que esperaba) de ver un F1 a tan corta distancia, y es de agradecer este tipo de iniciativas en nuestra ciudad. Por supuesto que sí.
Pero si este año a Alonso le ha costado competir, con éste coche, que fue suyo en 2010, hubiera sido adelantado hasta por los HRT (Hispania entonces), pues sin motor, ¿que voy a explicar? Quizás hubiera sido mejor decir que se trataba de la carrocería del F10, y que carecía de la mayoría de elementos mecánicos. Claro está, si no se iba a arrancar, ni a mover, es tontería traerlos, pero, claro, no es lo mismo ver el coche como vi el Renault F1 de 2008 en Lisboa, abierto o semiabierto, con las ruedas buenas, y en condiciones de rodar, que algo que además de a medias, está mal montado. Vale que lo de los triángulos de suspensión no es tan obvio, pero el volante, y las ruedas... tienen tela.
Seguro que hay gente que se habrá dado cuenta de otros detalles negativos que en mi corta visita se me escaparon. Estoy más que convencido de ello, y desearía que quien leyera esta entrada, se manifestara en dicho sentido.
No voy a comentar por cierto, la poca mano izquierda del guarda de seguridad que custodiaba el fórmula, porque podría ser demasiado subjetivo en mi juicio, pero vamos, que un poquito más de educación en su forma de dirigirse al público no le venía nada mal.
A ver si el año que viene, que dicen que traerán otro modelo, se lo hacen un poco mejor. Pero bueno, que al menos lo hagan como el presente.
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